Anahí

Anahí

Dejé atrás la opción de ver todos los días, a mi querida Eire, para darle una jubilación digna. Pero nunca imaginé, que esta decisión cambias mi perspectiva ante la necesidad de los equinos, de ser CABALLOS y vivir como tales, en libertad y rodeados de sus congéneres. ¡Llegar a Mas Casanova es lo mejor que he hecho nunca! Mi «gorda» es muy feliz. Ha dejado atrás inseguridades, miedos y problemas de conducto. Mercè y Xevi son personas excepcionales y con una calidad humana difícil de encontrar. Para ellos, los caballos son parte de la familia, siempre atentos por su bienestar, con experiencia contrastada y la sensibilidad necesaria para encontrar soluciones en cada momento o circunstancia. Las instalaciones muy cuidadas.
Sin duda lo recomiendo 100×100!
No me planteo tener otro caballo en otro sitio. ¡Gracias por todos chicos, muy buen trabajo!